30 de marzo de 2010

Una hoja artificial que produce energía..


Científicos de China presentaron el diseño de una hoja artificial capaz de producir energía con la luz solar.

El modelo está basado en los procesos químicos y biológicos de las hojas naturales y según los investigadores podría conducir a una dispositivo que capture energía solar y produzca un combustible "limpio" como el hidrógeno.

Los detalles de la investigación fueron presentados durante la conferencia anual de la Sociedad Química Estadounidense que se celebra en San Francisco, Estados Unidos.

Proceso eficiente

Cuando la luz solar cae sobre las hojas de un árbol, la planta puede convertir esa energía luminosa en energía química utilizando dióxido de carbono y agua.

Este proceso altamente eficiente, llamado fotosíntesis, conduce a que la planta emita oxígeno como un subproducto.

Ahora, los investigadores de la Universidad de Shangai Jiaotong, en China -que durante años han estado analizando esta capacidad de fotosíntesis de las plantas- lograron crear una estrategia de diseño para una hoja artificial que podría ser utilizada para dividir el agua en sus partes componentes: hidrógeno y oxígeno.

Se considera que esta división del agua podría ser una estrategia muy prometedora en la búsqueda de alternativas para los combustibles fósiles, como el carbón y petróleo, porque el hidrógeno podría ser utilizado como un combustible "limpio" con bajas emisiones.

Al quemarse, el carbón y el petróleo liberan dióxido de carbono, el principal gas de efecto invernadero. Pero el hidrógeno emite sólo vapor de agua durante su combustión.

El problema hasta ahora ha sido poder desarrollar una forma costo efectiva de producir hidrógeno.

Producción de Hidrógeno

El enfoque de los científicos en China está centrado en una hoja inorgánica artificial basada en una planta "infiltrada" con partículas de dióxido de titanio para producir hidrógeno.

"Este concepto podría ofrecer una nueva visión en el diseño de sistemas artificiales fotosintéticos basados en ejemplos biológicos para la construcción de un prototipo de trabajo que explote los recursos de energía sostenible" afirma el doctor Tongxiang Fan, quien dirigió el estudio.

Los científicos primero infiltraron dióxido de titanio en hojas de la Anemona vitifolia -una planta nativa de China- en un proceso de dos pasos.

Utilizando técnicas avanzadas de espectroscopía, los investigadores confirmaron que las características estructurales de estas hojas favorecían la recolección y aprovechamiento de la luz.

Tras las pruebas iniciales los investigadores encontraron que las hojas combinadas con dióxido de titanio eran ocho veces más activas en la producción de hidrógeno que el propio titanio.

Según los científicos, los resultados iniciales representan un primer paso importante hacia la construcción del prototipo de una hoja artificial.

Tal como señala el doctor Fan "la naturaleza todavía tiene mucho que enseñarnos, y el ingenio humano es capaz de modificar los principios de los sistemas naturales para mejorar su utilidad".

BBC Mundo



28 de marzo de 2010

10 plantas de interior que limpian el aire


Las plantas son parte fundamental en nuestras vidas porque nos dan el oxígeno que necesitamos para sobrevivir. Pero la vida actual nos obliga, a veces, a trabajar en lugares cada vez más cerrados que no tienen espacio para plantas y si las hay, se mueren porque no tenemos las adecuadas para ese lugar.

La NASA, en 1989, hizo una lista con las plantas que más sirven para los espacios cerrados, aquellas que limpian el aire: filtran los gases tóxicos y producen oxígeno y por lo tanto ayudan a hacer más “habitables” esos sitios. Además son fáciles de mantener porque las malas condiciones no les afectan, por el contrario, les gustan. Son capaces de vivir en sitios donde no llega mucha luz y el aire no es tan limpio, por la cantidad de CO2 que emiten las personas que lo habitan.

El estudio para hacer la lista, se basa en la interacción del hombre con el entorno en que habita: miden la cantidad de oxígeno que emiten las plantas versus el dióxido de carbono que botamos nosotros y los diferentes químicos que podrían haber en el ambiente: benceno, un solvente muy común en los hogares; tricloroetileno (TCE) y formaldehídos.

Las plantas examinadas

Estas plantas fueron las que reaccionaron mejor a las pruebas de los científicos de la NASA. Pueden estar en ambientes hostiles, si es que se riegan dos veces al día.

1. Palma de bambú (Chamaedorea seifrizzi): debe ponerse a la sombra o semi sombra, soporta bajas temperaturas y requiere humedad ambiental para que no se le sequen las puntas. Si está en ambiente seco, hay que vigilar las plagas de araña roja que la atacan.

2. Ficus o Laurel de la India (Ficus benjamina): necesita mucha luz, pero nunca exponerlo directo al sol, no necesita humedad ambiental, sólo rociar sus hojas con agua cuando lo riegues. La temperatura ideal es tenerlo mínimo a 13°C en invierno y en verano, máximo a 24°C. Se riega una vez cada ocho día en invierno y sólo dos veces por semana en verano.

3. Yerbera (Gerbera jamesonii): es indiferente a la cantidad de luz que le llegue, claro que mientras más exposición, más flores. Desde estar en un ambiente con mucha humedad, entre 75 y 90% y soporta máximo 25°C.

4. Hiedra (Herdera helix): es una planta trepadora que crece rápido, por eso hay que tener cuidado y evitar que aumente mucho su tamaño porque empezará a invadir toda la habitación. No hay que regarlas en exceso y necesitan un ambiente con temperatura entre 12°C y 20°C.

5. Crisantemo o Pomas o Margaritas de floristería (Chrysanthemus moriflolium): debe estar en un lugar claro y muy ventilado, no resiste mucho las estaciones calurosas por eso debes tener cuidado con el calor o luz en exceso. Siempre debe estar húmeda, porque las flores se marchitan de inmediato cuando les falta agua.

6. Lengua de Suegra (Sansevieria trifasciata): debe evitar el riego en exceso, deben estar con luz buena, pero no directa y tampoco a la sombra. La temperatura no puede bajar de los 10°C y viven en ambiente seco.

7. Espatifilo o Calilla o Anturio Blanco o Cala Blanca (Spathiphyllum sp.): florecen en verano, necesita riego frecuente y rociado de las hojas. Son de mucha luz, pero sin que lleguen directamente los rayos del sol.

8. Dracaena Janet Craig (Dracaena deremensis): se riega cada 15 días, en el período de crecimiento. No aguanta el exceso de sequedad ni el exceso de agua. Debe estar a semi sombra y la temperatura ambiente no debe bajar de los 10°C.

9. Dracaena Warneckii (Dracaena deremensis): es de clima cálido, la temperatura debe estar siempre entre los 15°C y los 26°C. Necesita un ambiente húmedo constante, pero sin estancamiento de gua. Durante el invierno se riega sólo para no secar la tierra.

10. Dracaena Marginata (Dracaena marginata): no debe estar expuesta al sol directo, necesita humedad elevada y hay que cambiarla de maceta cada dos años.



25 de marzo de 2010

¿Sabe cuál es la huella de carbono de su vehículo?


Hasta el 31 de marzo, las personas interesadas pueden conocer y compensar las emisiones 2010 de CO2 de sus automóviles en el stand de la SCX, Bolsa de Clima de Santiago, ubicado a un costado del Centro Cívico de Vitacura.

Ahí se calcula la Huella de Carbono de los autos, es decir, la cantidad de toneladas de CO2 que emiten anualmente, en función de la cilindrada del auto, el tipo de combustible que usa y la cantidad de kilómetros que recorre al año.

Una vez calculada la Huella de Carbono del auto las personas podrán comprar certificados de reducción equivalentes a la cantidad de toneladas de CO2. Estos certificados corresponden a proyectos de reducción o captura de CO2. El valor de cada tonelada es de USD12, calculados al valor del día.

El trámite es voluntario y también se puede hacer por Internet en www.scx.cl o en www.vitacura.cl

Ejemplos:

Un city car de 1.300 cc, que recorre 15.000 kms. al año, emite 1.8 TON de CO2, aproximadamente.

Un auto con motor de 2.000cc que recorre 20.000 kms. al año emite 3 TON de CO2, aproximadamente.

Un auto con motor de 2.500cc que recorre 30.000 kms. al año emite 5 TON de CO2, aproximadamente.

Un automóvil todoterreno con motor 4.000cc que recorre 30.000 kms. al año emite 7,7 TON de CO2, aproximadamente.

Objetivos

Como esta realidad constituye un proceso nuevo para el país, uno de los objetivos de esta campaña es acercar la problemática del cambio climático a la vida cotidiana de los chilenos y tratar de que nuestra sociedad sea pionera en la neutralización y reducción de CO2 a nivel individual, señala Carlos Berner, Gerente de SCX.

En referencia al negocio subyacente que emerge de la venta retail de estos certificados de neutralización de emisiones, la Directora de Comunicaciones de SCX, Valeria Peña, señala que esta iniciativa no tiene un objetivo económico, sino sólo catalizar un movimiento ciudadano que busca soluciones concretas al problema del cambio climático.

Respecto a las metas propuestas para esta iniciativa, ambos ejecutivos recalcaron que el foco de este esfuerzo no es la cantidad de personas que neutralicen efectivamente sus emisiones de transporte por uso de vehículos particulares, sino mas bien movilizar una demanda insatisfecha de la gente por un cambio sustentable.Peña indica que “a nosotros nos encantaría que a fines de marzo fueran muchos los autos con el sticker que indique auto “carbono neutral”.

Fuente: Terra

20 de marzo de 2010

Huella de Carbono, un desafío para la industria de nuestro país


La huella de carbono puede ser entendida como el total de las emisiones de gases de invernadero ya sea directamente e indirectamente por individuos, organizaciones, procesos o productos (UK Carbon Trust 2008). El concepto y el nombre de la huella de carbono nacen como un subconjunto del concepto de huella ecológica (Rees, W.E. 2006. "Ecological Footprints and Bio-Capacity: Essential Elements in Sustainability Assessment." Chapter 9 in Jo Dewulf and Herman Van Langenhove (eds) Renewables-Based Technology: Sustainability Assessment, pp. 143-158. Chichester, UK: John Wiley and Sons.). Esta relaciona la demanda de un individuo, nación o producto con la capacidad de regeneración que la propia tierra posee, por tanto productos o procesos con una elevada huella de carbono aumentarían tal tasa en relación con la capacidad de la tierra de remediarse.

Éste índice, una vez que ha sido calculado, permite la realización de comparaciones y ranking en los cuales productos que inicialmente iguales y poco diferenciados pueden ser nuevamente clasificados, diferenciándose en el nivel de emisiones generado en su proceso de fabricación o producción. Una vez que el tamaño de una huella de carbono es determinado, se procede a la aplicación de estrategias que favorezcan su disminución con el objeto de mitigar tales emisiones ya sea por medio de innovar en procesos de elaboración (materias primas), consumos energéticos o de generación de esta por medio de desarrollos de proyectos alternativos, lo cual se denomina en muchas empresas Europeas, gestión de huella de carbono.

Esto a su vez implica relacionar estos conceptos con la aplicabilidad de análisis de ciclos de vida. Este no es lo que se entiende por ciclo de vida de un producto, sino una evaluación ecológica desde la cuna a la tumba; significando una investigación en extenso sobre valoración de los impactos ambientales de un determinado producto o servicio necesario o causado por su existencia, desde la preocupación de utilización de las materias primas que lo compondrán, hasta que sucederá con tal producto o servicio una vez que sea descartado Este nivel de emisiones, asociado a su elaboración, podría afectar la demanda de acuerdo al peso, percepción y grado de importancia que los consumidores posean sobre este nuevo tipo de carácter.

Chile debe incorporar necesariamente este factor, que nuevamente AUN NO ES TEMA, ni siquiera estando debidamente presente en los marcos programáticos de los próximos candidatos. Esta cualidad nos afecta directamente en la medida que por ser exportadores principalmente de productos commodities, término anglosajón que se aplica a todo producto vendido a granel, indiferenciados y que a menudo se transa en mercados financieros, como lo han sido nuestros productos derivados tanto de la minería metálica y no metálica, la sal, el café, el petróleo, productos del agro, salmonicultura, por nombrar algunos; empiezan por primera a diferenciarse de productos de la competencia en aquellos en mercados que precisamente deseamos conquistar.

Esta semana, he compartido con dos grandes investigadores de la Universidad de Edimburgo, los cuales por razones del azar tuvieron la oportunidad de acompañarme a un supermercado quedando asombrados por los bajos precios de nuestros productos en comparación con lo que ellos encuentran en el Reino Unido. Sin embargo, al terminar su asombro y expresar que consideraban que en Chile poseíamos un alto nivel de “Calidad de Vida” (parámetros de evaluación que ellos poseen en relación al costo de vida), han declarado que a pesar de los precios observados, ellos no estarían dispuestos a comprar productos chilenos en el viejo continente, principalmente por ser estos “intensivos en carbono” en comparación con la oferta de productos similares provenientes de sus industrias locales, independizando su decisión de la variable precio.

Les he pedido que profundicen sus declaraciones para tratar de comprender qué estaría pasando en tales mercados. Me han hecho ver, que la comunidad en Reino Unido ha ido tomando la tendencia de seleccionar productos con una baja huella de carbono, lo que ha incentivado la industria local en desmedro de productos sudamericanos, africanos y australianos, que por una u otra razón presentan una huella mayor. Me han contado, que esta tendencia es cada vez más creciente de parte de los consumidores, los cuales sin ser ambientalistas o contar con conocimientos profundos en temas de sustentabilidad y cambio climático, la conciencia ambiental ha llevado a no consumir tales productos, diferenciándolos en intensivos o no, en emisiones.

Esto nos pone seriamente en alerta en relación a la sustentabilidad de nuestras exportaciones afectando directamente nuestra competitividad. Lo anterior debido a que precisamente por temas de distancias, nuestras exportaciones sólo podrán disminuir marginalmente su huella debido a los sistemas de transportes asociados. Esto nos lleva al desafío a identificar cómo, donde y que estrategias debemos implementar para disminuir la huella en casa, en los campos, en la industria que hoy en día utiliza CARBON o PETROLEO como fuente de energía. No obliga a pensar cómo competir con industrias locales en los países de destino, donde ya no hay aranceles a nuestras exportaciones, pero donde el comportamiento del consumidor es y será un tema en crecimiento, debido a que el cómo producimos será castigado Nos plantea el desafío de formar profesionales capaces de identificar y determinar tal huella, como a su vez innovar curricularmente donde estos temas sean incorporados.

Lamentablemente puede que ya sea tarde, la demanda ha empezado a privilegiar a industrias locales por sobre productos provenientes de países lejanos que cuentan con el problema asociado a viajes de exportación. Quien piense que tal comportamiento puede ser recíproco, creo no lo será, porque aun en nuestra cultura no se incorpora tal selección negativa a los productos extranjeros, que en países desarrollados ya ha comenzado. Si no incorporamos hoy tales conceptos desde la “cuna hasta la tumba”, nada sacaremos con estimar un IMACEC o un IPC, ya que no lograremos ingresar lo que producimos a los mercados que hoy hemos cultivado como nuestros demandantes, desencadenando prontamente una nueva crisis económica.

En relación con un Chile Sustentable y desarrollado, preguntas muchas: ¿Estamos siendo competitivos? ¿Cual debiera ser la política pública en relación a temas de competitividad?

Fuente: Carbo Ambiente

Azoteas Verdes: Un nuevo encuentro con la naturaleza


Respecto de los diferentes métodos que existen en la naturalización de espacios, podemos diferenciar dos. Uno implica el recubrimiento de la terraza o balcón con un sistema continuo y permanente de soporte a la vegetación, para generar áreas verdes con posibilidades casi ilimitadas. El otro consiste en la colocación de módulos separados y removibles que permiten lograr una naturalización rápida, accesible y práctica. Para ambos se colocarán una barrera contra raíces, un drenaje para el agua, un filtro y la tierra con vegetación.

En las nuevas búsquedas que realiza el ser humano por encontrar maneras de aproximarse a esa vida natural, silvestre y sana que fue dejando atrás con el correr de los años, el hombre implementó lo que se conoce como techo verde.

Lo importante, ante todo, es determinar si el lugar que elegimos para llevar a cabo esta técnica es apto para este tipo de ejecuciones, que representarán un peso significativo en el espacio a trabajar. Es por eso que recomendamos consultar con la administración del consorcio en el caso de edificios, o con especialistas en ingeniería o arquitectura.

Lo que debemos saber es que cada proyecto se adaptará a la región, a su clima y al tipo de edificación. Todo dependerá de si el techo que elegimos es de vegetación simple o intensiva. El primero constará de césped, flores, de un espesor de 5 a 8 cm., no es transitable y necesita de un mantenimiento mínimo. El segundo, en cambio, tendrá arbustos, plantas con flores, caminos, terrazas, fuentes con agua, un espesor de por lo menos 15 cm., es transitable y requiere de un sistema de irrigación y de mantenimiento.

Ahora bien, los beneficios que tiene esta técnica son casi indiscutibles. Para empezar, los techos verdes sirven como amortiguadores de sonido, disminuyendo considerablemente la contaminación auditiva que podría ingresar a nuestra vivienda por el reflejo de las ondas sonoras. El techo verde permite que las plantas absorban en su follaje el sonido y se reduzca el ruido urbano que se filtraría al interior.

Por otro lado, los techos verdes conforman un aislante térmico que aísla la terraza o balcón del calor, e impide que se genere el conocido “efecto de isla térmica”. Respecto de cuestiones energéticas, la naturalización de terrazas y balcones significa un ahorro en A.C. En zonas secas, la humedad que aporta esta técnica significa mayor confort para la vivienda, sin la necesidad de implementar sistemas de refrigeración que no sólo son costosos sino que representan un gasto de energía.

La utilización de vegetación fomenta la biodiversidad, debido a que las plantas ofrecen sustento a aves e insectos. De esta manera, estaremos colaborando con la naturaleza y aportando a otros seres vivos la posibilidad de aprovechar estos espacios. También se destaca el importante poder de absorción de CO2, ya que durante el día las plantas captan energía y CO2 y liberan oxígeno. De noche, respiran normalmente. Parte del CO2 pasa a formar parte de su biomasa en crecimiento.

Otra de las grandes ventajas del techo verde es la que nos brinda el convertirlo en un techo vivo. A esto nos referimos cuando hablamos de utilizarlo para el cultivo de alimentos. De esta manera, sumamos a todos los beneficios el de poseer nuestra propia huerta para consumo personal.

De todas formas, y como dijimos al principio, lo importante es permitirnos entrar en contacto con un ambiente verde. El techo vivo es una oportunidad ideal que nos brinda, no sólo los beneficios que mencionamos previamente, sino la paz y la armonía que aporta la naturaleza.

Fuente: Sustentator.org

¿Cuáles son las ERNC con potencial en Chile?


La estrechez energética vivida durante los últimos años y en particular en el 2008 en nuestro país, permitió levantar la discusión a nivel nacional sobre el uso y masificación de energías renovables no convencionales (ERNC), tema que si bien atrae a la gran mayoría de la opinión pública y en particular al Gobierno y Organizaciones Medioambientales, no es tan fácil su introducción dentro de la matriz energética del nacional. Pese a eso, Chile por su geografía presenta múltiples formas de desarrollo de este tipo de energías.

Chile presenta una riqueza natural envidiable por cualquier país desarrollado, su variada geografía permite que se propicien condiciones ideales para la producción de diversos tipos de ERNC, destacando:

Energía eólica: Este tipo de energía renovable es resultado de las diferencias de presión que la tierra, la cual genera masas de vientos que se desplazan por diferencias de presión. El norte y sur de Chile presentan condiciones ideales para el establecimiento de parques eólicos, por lo cual se deben realizar prospecciones y seguimiento de la capacidad energética de los vientos en distintas zonas geográficas. Precisamente en el sur del país, existe actualmente el único parque eólico conectado a la red eléctrica (parque eólico Alto Baguales, Aisén), el cual produce 2MW equivalente al 0,02% de la capacidad eléctrica instalada (al año 2005). En este tema, los fondos CORFO-CNE de años anteriores permitirán que en nuestro país se establezcan los primeros parques eólicos con tecnología de punta. Uno de estos proyectos lo lleva a cabo la empresa Energías Renovables del Bio Bio, filial de la empresa española Eólica Navarra, la cual montará durante este año en la Región del Bio Bio el parque Hualpen Sur, con una capacidad instalada de 20MW. El parque estará constituido por 10 aerogeneradores de 2MW construidos por el principal productor de aerogeneradores del mundo la empresa danesa VESTAS.

Mini centrales hidráulicas: a diferencia de las grandes centrales hidroeléctricas, el impacto ambiental derivado de las minicentrales hidráulicas es mínimo, permitiéndoles ser catalogadas como fuente de ERNC. Las centrales hidroeléctricas funcionan convirtiendo la energía potencial de una masa de agua en energía cinética al pasar por un salto, para su posterior transformación en energía eléctrica por medio de una turbina y un generador eléctrico. Dentro de esta categoría entran las centrales hidroeléctricas con capacidad instalada inferior a 20MW. Actualmente existen alrededor de 110 instalaciones de este tipo en el país, destinadas principalmente a la electrificación de viviendas y a telecomunicaciones*.

Energía solar: El norte de Chile se lleva todos los créditos en este tipo de energía, presentando un alto potencial energético. La Energía solar es aquella que proviene del aprovechamiento directo de la radiación emitida por el sol, transformándola mediante colectores térmicos en calor o a través de celdas fotovoltaicas en energía eléctrica. Actualmente, este tipo de energía es utilizada en proyectos de electrificación rural aislada y en actividades artesanales de cocción de alimentos a través de cocinas solares y deshidratación de frutos. Existen grandes expectativas respecto al potencial que posee Chile en la producción de este tipo de energía, pero aún falta un salto tecnológico importante en el desarrollo de celdas fotovoltaicas, cuyo rendimiento de conversión energética la hacen poco competitiva en relación a otros tipos de energía.

Energía proveniente de Biomasa: El término biomasa se refiere a toda la materia orgánica que proviene de árboles, plantas y desechos de animales que pueden ser convertidos en energía; o las provenientes de actividades agrícolas (residuos de maíz, café, arroz, etc.), forestales (desechos de podas y raleos, aserrín y despuntes de aserraderos) y de los residuos urbanos (aguas negras, basura orgánica y otros).

Actualmente la biomasa se utiliza en procesos de producción de vapor, biogas y generación de electricidad en localidades rurales aisladas. El potencial que tiene este tipo de energía en nuestro país se ve favorecido por dos tres puntos: a) Alto nivel técnico tanto en el sector forestal como agrícola;b) grandes extensiones de tierras susceptibles de ser utilizadas para cultivos energéticos;c) gran cantidad de desechos provenientes de actividades silvoagrarias.

Geotérmica: La energía geotérmica corresponde a la energía calórica contenida en el interior de la tierra, transmitida por procesos de conducción térmica hacia la superficie. Actualmente se desarrollan numerosos estudios de prospección y evaluación del recurso por parte del Servicio Nacional de Geología y Minería, Universidades y empresas privadas.

Mareomotriz: corresponde a la energía cinética capaz de transmitir las mareas. Si bien Chile posee grandes extensiones de costa, no existen en el mundo proyectos que sean realmente eficientes, por lo que aún falta mayor desarrollo tecnológico para que sea una fuente energética viable. Es actualmente una de las ERNC más costosas junto a la fotovoltaica y geotérmica.

Fuente: Ecodesarrollo.cl

GE como la compañía más sustentable del mundo según el ranking de Maplecroft Climate


General Electric fue reconocida como la compañía más sustentable del mundo por el Global 100 Sustainable Companies y el Maplecroft Climate Innovation Index, dos de los rankings medio ambientales más reconocidos.

General Electric encabeza en el 2010, dos de los rankings mundiales más importantes en sustentabilidad corporativa, el Global 100 Sustainable Companies y el Maplecroft Climate Innovation Index, respaldados por la revista Corporate Knights y Bloomberg, respectivamente.

Estos índices evalúan la forma en que se están transformando las grandes compañías del mundo para cuidar el medio ambiente y promover un sector privado más amigable. Los rankings son organizados por reconocidas firmas del sector privado y se enfocan en calificar el desempeño de las compañías respecto de diferentes categorías que les permiten a los inversionistas tener mejores herramientas de análisis e información para tomar sus decisiones de invertir en ellas. El Global 100 es desarrollado por firmas de banca de inversión entre las cuales están Global Currents e Inflection Point; y el Índice Maplecroft de Innovación Climática, es desarrollado por Bloomberg y la consultora internacional de riesgo Maplecroft.

Ecomagination, es la iniciativa de negocio, a través de la cual, GE viene desarrollando soluciones amigables con el medio ambiente que permiten poner al alcance de los consumidores y clientes productos con eficiente consumo de energía e impacto ambiental. Steve Fludder, Vicepresidente de Ecomagination afirmó, "estos reconocimientos nos dan una validación externa del camino recorrido con Ecomagination y nos acercan a los compromisos que adquirimos para convertirnos en una compañía más sostenible, año tras año”.

El programa ha hecho posible que GE no sólo ajuste sus unidades de negocios para lanzar más de 80 productos amigables con el medio ambiente en 2009 y genere ganancias por más US$17 billones en 2008, sino que internamente, la compañía ha modificado sus operaciones para reducir sus impactos ambientales. Entre 2006 y 2008, GE redujo sus emisiones de carbono de 10.8 millones de toneladas a 6.5 millones, mientras aumentaba sus ventas de 150 billones a 181 billones durante el mismo periodo. Así mismo, para 2012, GE se comprometió públicamente a reducir su consumo de energía en 20%.

Steve Fludder, dio un especial agradecimiento a todos los empleados de la compañía, pues las cifras son producto de un esfuerzo colectivo de escala global, de la que también según la revista Forbes, es la compañía más grande en el planeta: "Agradezco de corazón a nuestros 300,000 empleados a lo largo de 100 países de operación en este proceso para alcanzar nuestras metas ambientas. Estoy orgulloso de estos logros y espero que todos ustedes lo estén tanto como yo”, concluyó el Vicepresidente de Ecomaginaiton.

Sobre los índices

La filosofía que inspira estas herramientas de comparación ambiental, es que si las más grandes empresas establecen un nuevo estándar en su manera de operar, las demás también lo pueden y lo deberán hacer con el tiempo. Así mismo, estos índices hacen de estas compañías más atractivas para inversionistas, generando un círculo virtuoso en el que las organizaciones más sustentables son recompensadas con un mayor flujo de capital para inversión y crecimiento.

Los índices son el Global 100 de las compañías más sustentables del mundo (http://www.global100.org/) y el Índice Maplecroft de Innovación Climática (http://www.maplecroft.com/). El primero, evalúa internamente a las 300 compañías más grandes del globo, aquellas que emplean a más de 3 millones de personas en el planeta y que juntas suman activos por más de 4 trillones de dólares, en indicadores ambientales muy puntuales, tales como Productividad y Uso de Energía, Agua y Carbón, Capacidad de Innovación Ambiental, y Liderazgo en sustentabilidad.

El segundo, desarrollado por Bloomberg, es el Índice Mapplecroft de Innovación Climática, que evalúa a las 300 compañías más grandes de EU en términos de su capacidad para ajustarse a los cambios en la regulación y política ambiental y para generar innovaciones en temas relacionados con el clima. Esto le facilita a un inversionista conocer detalladamente qué tanta capacidad tiene una empresa para aprovechar las oportunidades y administrar los riesgos que trae el futuro económico y ambiental del planeta, de manera exacta, medida por expertos en inteligencia corporativa de riesgos de Bloomberg y la firma Maplecroft.


Fuente: Dinero.com